Poné en práctica lo aprendido

LA AUTO OBSERVACIÓN

Esta semana vamos a trabajar con la auto observación, tomate tu tiempo.

Observa tus pensamientos durante el día

-¿Suelen ser positivos, negativos o simplemente neutros? ¿Son recurrentes?
Anotarlos es importante para ver si se repiten, cambian o te dan alguna información de la que no eras consciente.

-Define tus sensaciones físicas
¿Te levantas llena de energía? o ¿Te sentís cansada? ¿Tenés la sensación de haber dormido bien? o ¿Sentís que no has descansado lo suficiente?

Describe todo lo que sientas, desde tu estado anímico hasta problemas físicos o de movilidad. Las sensaciones físicas, son los mejores indicadores para
saber si estás siendo coherente o no. Si sentís nerviosismo, ansiedad, inquietud, hambre constante, enfado o cualquier otra emoción busca la causa.

¿Qué crees que hay detrás?
Te aseguro que siempre te vas a encontrar con 2 posibilidades:
*Que te sentís en obligación a hacer algo que no querés.
*Que no te permitís expresar o realizar algo que deseas.

-Describí los sentimientos que genera tu reflejo en el espejo
¿Te sentís satisfecha/o, sentís indiferencia, preferís no mirarte u odias lo que ves? ¿Te sueles comparar con alguien? ¿Sentís impotencia?
En este punto es en el que más información vas a obtener sobre vos misma/o.

-Observa tu predisposición ante la vida
¿Cómo afecta en tu humor el día de la semana en el que estás? ¿Te gusta tu trabajo? ¿Sentís que sos afortunada/o? ¿Estás viviendo la vida que deseas?
Acá te pueden surgir algunas dudas, pero si eres sincera/o con vos misma/o, descubrirás que quizás deberías tomar algunas decisiones.

-Mide tu productividad y la forma en que gestionas tu tiempo
¿Sentís que siempre te falta tiempo?
Imagino que si sos productiva/o, terminarás tu jornada teniendo la sensación de haber cumplido con tus objetivos y por lo tanto estarás satisfecha. Aunque
si por el contrario, no cumplís con tus objetivos en el tiempo previsto, estarás insatisfecha/o.

-¿Qué crees que está fallando?
Demasiado perfeccionismo, demasiadas actividades, demasiada creencia de que trabajar mucho es mejor, demasiadas obligaciones.

-Atenta a tus reacciones ante las personas que te rodean
¿Cómo te sienta que te hablen ni bien te despertás? ¿Cúal es tu estado de ánimo después de 20 llamadas de teléfono? ¿Cómo reaccionas cuando alguien pone en duda tu profesionalidad? ¿Qué sentís cuando te abrazan? ¿Cómo actúas ante la autoridad? ¿Qué te hace sentir tu jefe? ¿Por qué temas sueles discutir con tu pareja? ¿Qué es lo que más te molesta de los demás? ¿Sentís que te juzgan constantemente?
Empezá a plantearte que los demás son sólo el reflejo de lo que tienes en tu interior y verás cuánta información obtienes.

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